Los productores afirmaron que la producción interna es suficiente para cubrir la demanda hasta marzo de 2026.
Productores arroceros denunciaron este miércoles que atraviesan una crisis sin precedentes, según la Federación Nacional de Productores de Arroz (Fenarroz), debido al incumplimiento de acuerdos por parte del gobierno y la autorización de importaciones descontroladas.
Entre los problemas señalados por los productores están la reducción injustificada del precio del arroz cáscara, la manipulación de las taras y otros abusos que afectan directamente al sector, poniendo en riesgo la seguridad alimentaria del país.
Marcelo Reyes Jorge, presidente de Fenarroz, advirtió que las continuas importaciones desde 2024 han provocado un colapso financiero en el sector, con pérdidas que podrían superar los 4,000 millones de pesos, y podrían destruir décadas de trabajo de los productores dominicanos. Señaló que el año pasado se permitieron más de 4.7 millones de quintales importados, pese a que el decreto vigente limita el volumen a 23,300 toneladas, beneficiando principalmente a grandes empresas mientras se afecta a los productores locales.
Durante un encuentro celebrado este miércoles en la Ciudad Agropecuaria del Nordeste, en San Francisco de Macorís, los productores reclamaron cero importaciones, la activación de factorías pequeñas para aumentar la recepción de arroz cáscara, la revisión de las taras, indemnización a los afectados y una mejor calendarización de siembra. Estas propuestas serán presentadas ante la Comisión Nacional Arrocera.
Los productores afirmaron que la producción interna es suficiente para cubrir la demanda hasta marzo de 2026, pero los permisos de importación continúan favoreciendo intereses privados, generando dependencia del mercado externo y vulnerabilidad para el sector.
La producción de arroz, que mueve más de 45,000 millones de pesos anuales, se concentra en 14 provincias y es cultivada por unos 30,000 productores. En 2024, la cosecha alcanzó 14,045,411 quintales, superando la producción de 2023, pero la sobreimportación amenaza con desestabilizar los precios y afectar tanto a productores como a consumidores.