Confirmó que mantendrá a Hunt como ministro de Economía, que fue nombrado por Truss para reforzar la confianza y romper su plan de reducción de impuestos.
Después de siete semanas donde la reputación de credibilidad financiera de Reino Unido se viera sacudida por errores políticos, los altos ejecutivos de las finanzas dieron una cautelosa bienvenida al nuevo primer ministro, Rishi Sunak.
Sunak es un conocido de los bancos, gestores de activos y aseguradoras del país, ya que anteriormente dirigió el ministerio de Finanzas durante dos años cuando la pandemia por Covid-19 hizo mella en la economía.
Los jefes de finanzas esperan que su nueva administración tenga una influencia estabilizadora en los mercados, esto después de que los profundos planes de recortes de impuestos de su predecesora, Liz Truss, asustaran a los inversionistas y provocaran una caótica venta de bonos del Estado donde el Banco de Inglaterra se vio obligado a intervenir.
“La estabilidad política es absolutamente crítica (…) Una continua oscilación radical del péndulo sobre la política es algo que en cualquier país no es útil”, mencionó a Reuters, Miles Celic, director ejecutivo del grupo de presión financiera TheCityUK.
Los jefes de finanzas quieren que Sunak equilibre el gasto en infraestructuras con la flexibilización de la política de inmigración para trabajadores cualificados y la inversión en educación, añadió Celic.
Sunak también debe mantener la competitividad global de Reino Unido, mencionó Noel Quinn, CEO del banco HSBC.
“Hay algunas áreas en las que creo hay potencial de mejora para impulsar una mayor competencia”, dijo Quinn y añadió que acoge con satisfacción las recientes medidas para integrar la competitividad en los objetivos de los reguladores.
Una de las preocupaciones de los banqueros son los planes que se barajan bajo el nuevo ministro de Economía, Jeremy Hunt, para recaudar más impuestos de los bancos, una decisión que se tomará antes de que se presenten los planes fiscales el 31 de octubre.
Los grupos empresariales llevan tiempo abogando por una reducción de impuestos, ya que el país tiene un sistema fiscal poco competitivo para los bancos, con una tasa sobre los balances y un recargo fiscal.
Según los analistas, la llegada de Sunak al puesto más alto ha aliviado parte del nerviosismo en torno a las perspectivas de la economía, impulsando los mercados nacionales y aliviando los costos de los préstamos.
En la City existe una gran preocupación por el daño que ha sufrido la reputación de Reino Unido en cuanto a la elaboración de políticas sólidas, pero ahora hay margen para un reajuste”, señaló William Wright, director general del grupo de expertos New Financial.
Sunak confirmó ayer que mantendrá a Hunt como ministro de Economía, después de que fuera nombrado por Truss para reforzar la confianza y para romper gran parte de su plan de reducción de impuestos.
Planes preexistentes
En su primer discurso frente al número 10 de Downing Street, Sunak expresó que quiere construir una economía que aproveche las oportunidades del Brexit, insinuando que puede haber más desregulación.
La industria financiera británica, de 164,000 millones de libras, quedó excluida de atender directamente a los clientes de la Unión Europea tras el Brexit.
Sunak es un conocido de los bancos, gestores de activos y aseguradoras, ya que anteriormente dirigió el ministerio de Finanzas durante dos años cuando la pandemia hizo mella en la economía.
Reuters