La confianza empresarial en la evolución de la economía de Japón mejoró ligeramente en el segundo trimestre del año, marcando la mejoría del indicador en dos trimestres, pese a la persistente incertidumbre sobre la guerra comercial.
El último informe de coyuntura económica trimestral del banco central japonés, conocido como Tankan, mostró este martes que el índice de confianza entre las grandes empresas manufactureras nacionales se situó en los tres meses hasta junio en 13 puntos, uno por encima de los 12 de la encuesta previa hasta marzo.
Este nivel es superior a las previsiones del BoJ, que estimaba que la confianza de los grandes grupos nipones, incluidos los de la industria automotriz y la electrónica, se estancaría, y se sitúa tres puntos por encima de las estimaciones de los analistas, que vaticinaban un empeoramiento por la guerra comercial y mientras las negociaciones entre Japón y Estados Unidos parecen infructuosas.
El negociador japonés en materia arancelaria, el ministro Ryosei Akazawa, se ha reunido en repetidas ocasiones con sus homólogos estadounidenses, pero aún no se ha llegado a un acuerdo, ya que el país asiático se opone rotundamente al incremento del 25 % impuesto a los envíos de vehículos y autopartes.
Las del motor supusieron el 28,3 % de las exportaciones japonesas a EE.UU. en 2024, el sector de mayor proporción, seguido por los envíos de componentes para ellos, que supusieron el 5,8 %.
La confianza empresarial en Japón se resiste a los aranceles
Esta encuesta Tankan es la primera que se publica desde que el presidente estadounidense, Donald Trump, anunciara sus autodenominados «aranceles recíprocos» a principios de abril, que siguen pausados y con expectativas de que la moratoria que tiene previsto vencer el 9 de julio se extienda.
A pesar de la incertidumbre en torno a las políticas arancelarias de Washington, que de acuerdo a Tokio ya se ha dejado notar entre sus empresas, la confianza corporativa se mantuvo sólida.
En lo que respecta a las grandes empresas no manufactureras japonesas, entre las que se incluyen las del sector servicios, su confianza empeoró un punto respecto al trimestre previo, hasta 34.
Según las previsiones del BoJ, se espera que la confianza entre las grandes empresas manufactureras se mantenga inalterada en el trimestre que acaba de arrancar, aunque estima que la de las no manufactureras decaerá siete unidades.
El índice Tankan mide el porcentaje de compañías japonesas que creen que las condiciones de negocio son favorables, menos las que piensan lo contrario, y está considerado como un importante anticipo sobre el crecimiento económico de Japón y un factor influyente en las decisiones sobre política monetaria del BoJ.