El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, dijo el viernes que su gobierno no necesita eliminar el déficit fiscal el próximo año, dada la importancia de financiar proyectos prioritarios e inversiones en construcción.
En una conferencia de prensa, Lula dijo que no hay necesidad de eliminar el déficit presupuestario inmediatamente y reprendió a los inversores por ser “demasiado codiciosos” al exigir objetivos que no pueden cumplirse.
“Sería difícil llegar a un objetivo (de déficit) de cero, especialmente porque no quiero hacer recortes en las inversiones en construcción”, dijo a periodistas. “No voy a fijar una meta fiscal que me obligue a empezar el año recortando miles de millones en proyectos que son una prioridad para este país”.
“Si Brasil tiene un déficit del 0,5% o del 0,25%… Eso es prácticamente nada. Así que tomaremos la decisión correcta y haremos lo que sea mejor para Brasil”, añadió, en una reunión informativa con periodistas en el palacio presidencial.