El presidente chino, Xi Jinping, publicó este lunes una carta en el diario brasileño Folha de São Paulo en la que reafirma el compromiso de China con Brasil, de cara a su visita oficial al país sudamericano y en vísperas de la Cumbre del G20 en Río de Janeiro.
Xi subrayó la importancia de profundizar la cooperación bilateral, destacando el alineamiento de la Iniciativa de las Nuevas Rutas de la Seda con las estrategias de desarrollo de Brasil, que aún no forma parte oficialmente del proyecto chino.
En la misiva, Xi recordó los 50 años de relaciones diplomáticas entre ambos países y que Brasil “fue el primer país de América Latina en establecer una asociación estratégica con China y sigue siendo un ejemplo de cooperación para el desarrollo mutuo”.
En el ámbito económico, destacó que “China ha sido el mayor socio comercial de Brasil durante 15 años consecutivos”, con un comercio bilateral que superó los US$136,000 millones de enero a octubre de 2024, con exportaciones brasileñas centradas en productos agrícolas y materias primas, según estadísticas del gigante asiático.
En su carta, Xi propuso “promover continuamente el refuerzo de las sinergias entre la Iniciativa de las Nuevas Rutas de la Seda y las estrategias de desarrollo de Brasil, fortaleciendo la naturaleza estratégica, global y creativa de la cooperación mutuamente beneficiosa China-Brasil”, y creando “más proyectos ejemplares que atiendan demandas futuras y ofrezcan beneficios duraderos”.
El presidente también resaltó el papel de los intercambios culturales, señalando la creciente popularidad de la samba, la capoeira y la bossa nova en China, y la aceptación de festividades chinas, como el Año Nuevo Lunar, o la medicina tradicional del país asiático, en Brasil.
“Entre nuestros países, hay interacciones frecuentes entre jóvenes, periodistas y académicos, así como intercambios dinámicos entre entidades locales”, afirmó Xi, subrayando la importancia de estos lazos para fortalecer el entendimiento mutuo.
En cuanto a la gobernanza mundial, el también secretario general del Partido Comunista Chino (PCCh) llamó a reformar instituciones como el Fondo Monetario Internacional (FMI), el Banco Mundial y la Organización Mundial del Comercio (OMC) para reflejar mejor las voces del sur global, países en desarrollo o emergentes, principalmente ubicados en América Latina, África y Asia, que comparten desafíos económicos, sociales y políticos similares, y buscan una mayor representación en el sistema internacional.
A su vez, Xi expresó su apoyo a la propuesta del presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, para crear una Alianza Global contra el Hambre y la Pobreza, subrayando el compromiso de China con iniciativas que fomenten el desarrollo inclusivo y equitativo.
También abordó temas de desarrollo sostenible y transición energética, áreas donde China y Brasil han mostrado interés en colaborar, y apostó por fortalecer la cooperación en mitigación del cambio climático y promover políticas verdes que impulsen un desarrollo sostenible.
En este sentido, el líder chino destacó que la alineación de políticas entre ambos países puede ser fundamental para lograr una “producción y vida sostenible”, además de una “coexistencia armoniosa entre el ser humano y la naturaleza”.
En su conclusión, Xi abogó por iniciar un nuevo periodo de “50 años dorados” para las relaciones bilaterales, con un enfoque en la cooperación estratégica a largo plazo.
“Debemos continuar fortaleciendo los mecanismos de cooperación como Cosban para consolidar una relación estable y madura entre grandes países en desarrollo”, remató.